viernes, 19 de febrero de 2010

Back street girl


Me gustan los Rolling Stones. Me gustan sus letras. Sobre todo las viejas. Aunque también lo de los 80 y 90, a diferencia de lo que dice Jarvis Cocker con Pulp, sí son una buena versión de ellos mismos. Y eso que amo a Pulp, y al JC. Hoy me gusta particularmente Back Street girl, si no la han escuchado, búsquenla. Es de 1967. Es de su disco "Flowers". Mick es tierno y duro al mismo tiempo. Dice una cosa así: please don't be part of my life, please keep yourself to yourself, don't try to ride on my horse (otra vez), don't want you out in my world, just you be my back street girl. Please don't call me at home, please don't come knocking at night, please never ring on the phone. Don't want you out in my world, just you be my back street girl.
Cuando tenía 19 años me enamoré por primera vez de un muchacho. Él era increíble en muchas cosas. Pero yo no me conocía "queriendo" a alguien. Recuerdo cosas como el principio y claro, más de diez años después, lo veo todo con mucha ternura. Sobre todo a mi misma. Ya han visto cómo era a los 19, es más, hay gente aquí que me conocía a esa edad. Me recuerdo cómo lo que fui, una inocente salvaje feliz. Cómo no sabía cómo quería, nunca supe entender la lógica de esos caballos salvajes y esa turbulencia que emanaban de mí. Me da ternura esa pequeña Nilbia, muy muy pequeña. Siento empatía por todas las veces que lloré, cuánto sufría. Cuánto drama. La intensidad del dolor. No es que me ría de ella, sino ahora la veo de lejos, y sí me sorprende cómo evoluciona la manera de querer de cada quien. Por eso me alegra haber amado varias veces en mis 30 años. Aún cuando sólo he amado a hombres en los últimos 10 y aún son los más pocos. Cuando amé por 2da vez fue todo lo contrario de la 1era vez. Ha sido una de las historias más bellas de mis anales. Él era diferente. Él era tranquilo, no ardía en él un desenfreno, ni una pasión revolucionaria, su alma era sensible eso sí y quería ser querido. Y sabía qué quería y me quería a mi a pesar de todo, de la distancia, de nuestros pequeños años. Todo o nada fue la amenaza. Y huí. ¿Y cómo no hacerlo? ¿Cómo le pides a alguien de 21 años que apenas ha descubierto las delicias del amor, del sexo, del ego alimentado que se quede en un lugar? Alguien que se está volviendo mujer. Y el costo fue perderlo. Fue la 1era persona que quise y que perdí- Eso es aún triste. Luego viví un par de historias llenas de secretismos, reprimiendo mis sentimientos y mis expectativas. Fueron mis peores episodios porque dañaron la parte más blanda y pura de mi, mi lado emocional. Pero no me arrepiento y me anoté un 10 porque fueron relaciones (y los amé) basados principalmente en deseo físico y pasión. Todos deberían hacer eso alguna vez en la vida, apostarle al fuego. Sentir con taquicardia. 4 hombres que amé. Las historias de sexo no cuentan en este post. Y hubieron 2 más con la palabra amor de adjetivo calificativo. A ambos también los amé, de forma distinta. El primero que todos conocen aquí es sin duda mi historia más perfecta hasta la fecha (la más parecida a la casita feliz, una pareja paciente y con quien crecí) y él será mi amigo para siempre. El último se parece curiosamente al de mis 21 años. Todo o nada, no, ni un punto en medio. Lo amé en poco tiempo y quizás no lo suficiente. Con el freno de mano puesto, como decía Iliana hace unos años. Como lo que soy, una mujer en transición. Una yo corriendo. Fue distinto al 2001 porque ahí él me había impulsado a seguir mi rumbo, aquí yo ya estaba en una etapa de auto reflexión. Supongo que él me quiso también, pero fui egoista y opté por la vida. Porque ahora mi miedo me hizo escoger. Y el costo será el mismo, perder a alguien más. Me quedo con su olor. Y mi mente vuela y recuerdo cómo era yo cuando amé por primera vez, era casi un niño, en masculino, por lo inexperta. Un día de esos de 1999, en la sala de estudiantes del cide, tomados de la mano, bromeando, jugando como niños, género masculino. Y fue una voz externa la que me dijo "ya eres su novia, sé su novia". Y ¿qué quiere decir eso? ¿Cómo ser una mujer que quiere? Me costó mucho entender los límites entre dos personas, el respeto, el control, el amor propio, y aceptar cómo soy amando. Y si el terreno era desconocido, peor fue el intento de maniobra.
Pura complicación, pero de ésas vivo. Fue una turbulencia joven, virgen, nueva, incluso inocente. Sí por eso sufrí tanto, porque entregué gran parte de mi corazón, pero uno aprende que las relaciones y el corazón son los únicos terrenos donde uno permite verdaderamente darse en la madre. El amor a los 30 es mejor, lo creo firmemente. Lo descubrí apenas. Me baso justamente en lo que él me dijo a inicios del 2010: ya no somos niños, y es querer o no querer. Pero querer lo suficiente. Y sí, es escoger el grado de complicación, de turbulencia y de amor que uno desea.
Don't want you part of my world, just you be my back street girl, bien me lo cantó hoy Mick.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Siempre hay que apostarle a la vida, nunca te arrepentirás de haber tomado esa decisión si en verdad te conoces y estás convencida que eres del tipo de personas que, a pesar de que les gusta amar, no viven sólo de amor, ni para amar, ni a través del otro.

Besos,

Adri