viernes, 17 de junio de 2011

10 novedades en mi vida


Otra gran mentira. Nada de novedades, ay sí, anoche empecé a pensar por qué de quedarme en NY me debo mudar... junto con Norma, obvio, uds ya saben de mi codependencia (lo tengo con pocas amigas, ay mis viejas).

Una y la más grande, ya necesitamos subir de catego- Algo con más caché, eso vaya. Dos, Bedstuy, live or die, es literal. Anoche que llegaba semi ebria, en taxi gracias a Jehova, para variar había como 5 patrullas en mi cuadra. Y los ninis ahí en su típico escándalo. Mismos que son, claro, los vecinos siempre en su portal, los meros ninis de Bedstuy. No quiero sonar racista pero ya es la ley en la zona y bueno me caen bien pero la n e t a estas razas no respetan ya nuestro pedigri, o allure, nuestras canas. Nunca me han hecho nada, sospecho que tienen trato con los judíos ricos que nos rentan... (bendito dios judío), pero hasta pasar por los porches es bastante molesto actualmente, no respetan ni la castidad de una! Siempre gritando, chiflando, que si me disparan los huevos y el jugo (obvio dije que no, además de que el adolescente afroamericano parecía de 19), y entonces uno que es una dama, se apena. Más que apenarme, la verdad, ya uno no está estos estos trotes. Osea ya ni puedo presumir... por cierto luego un yemení me pidió en matrimonio (también un dueño de tienda allá por Jay St, sí un entrepreneur), saben qué lo detuvo? enterarse que tengo 31 años! Osea a uno la discriminan por eso, ya es la segunda vez! El otro día un judío amigo de una amiga que le gustaba mucho y que ya se quería casar y jajaja todo cambió cuando le revelé la edad... (que hice enfásis en el 1979 y en su 1987 ...). Eso sí, todos dicen que me veo de 26 o 27, supongo que a esas razas no les tinca que mis ovarios sean mucho más viejos de lo que parece mi nariz de bola- lalala

Bueno, más allá de eso (y mis aventuras macuarras), insisto, el tema de los balazos y los conatos de riñas ya no me laten tanto y bueno a fin de cuentas "ya estuvo"! Ya estuvo de Bedstuy, estuvo bueno por un rato. Eso sí, mi hogar está rebonito, la Clarita lo decoró rebien, es hogareño, lo queremos y mucho. De hecho hasta me gustaba vivir en un barrio netamente neuyorkino y que recordaba lo que era esta ciudad hace unos años de acuerdo con nostálgicos expertos. Pero pues la gentrification burguesa llegó a mi cuando escuché los primeros disparos (estaban lejos por si de pronto planearon venir a rescatarnos). Tiene lavadora y secadora, y los judíos son la pura simpatía, hasta me gusta haberlos conocido, esa raza ortodoxa es singular. Pero, hay mejores zonas.

Y luego el argumento más sólido: hay unos insectos HORRIBLES que no puedo tolerar. Son como unos mil pies enormes con antenas y según Norma son inofensivos. Pero yo siempre grito con sólo verlos. El otro día tuve que matar a dos!! en mi cuarto! y ya estaba por ahí otro cadáver de hacía unos días. Ay no pude dormir bien. Esa noche soñé con una balacera en el barrio y yo tenía que estar encerrada en mi cuarto. Ven? Ilustra mi estrés pos traumático al ver a los insectos sin nadie que los matará y luego teniendo que estar rodeada de asesinos a sueldo. (Nilbia you're so dramatic, me han dicho por ahí).

Moraleja: más me vale aceptar el primer empleo que me ofrezcan porque cada vez estoy más pendejita y urge que mis neuronas se ocupen.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Manis, lo de los insectos es insoportable y razón suficiente para mudarte, lo de las balas pasa.

Agri